El transporte público en Argentina aumentará su capacidad máxima de pasajeros permitida, a raíz de las flexibilizaciones implementadas por el presidente Alberto Fernández y derivadas por un descenso sostenido de contagios de coronavirus en las últimas semanas.
Los colectivos deberán circular con una cantidad de pasajeros que no supere la capacidad de asientos disponibles, con excepción de los horarios de mayor requerimiento del servicio y ante el exceso de demanda, donde podrá ampliarse hasta 20 pasajeros de pie.
Respecto a trenes, deberán circular con una cantidad de pasajeros que no supere la capacidad de asientos disponibles, y en horarios de mayor demanda podrán incorporar hasta 4 personas paradas por metro cuadrado.
La Ciudad de Buenos Aires incrementará la cantidad permitida de pasajeros en el subte. De acuerdo con la evolución del promedio de contagios diarios, al nivel de camas ocupadas en el sistema de salud, a la aceleración en el proceso de vacunación y al incremento de la demanda en el subte -actualmente se realizan entre el 25% y 30% de los viajes pre-pandemia-, se decidió ampliar la capacidad a 40 personas paradas por coche, además de las sentadas.
Los controles continuarán en las distintas estaciones de la red de subtes para cumplir con la nueva capacidad permitida y se pedirá a los usuarios que eviten viajar en horas pico (entre las 7 y las 9 de la mañana y entre las 4 y las 7 de la tarde).
El Ministerio advierte que, en caso de que los contagios aumenten a partir de la circulación comunitaria de la variante delta del coronavirus, las medidas se volverán a endurecer.
