El ministro de Economía, Martín Guzmán, declaró que desean un acuerdo con el Fondo Monetario Económico (FMI) antes de marzo de 2022 y negó que la deuda externa sea la causante de los altos índices del Riesgo País este año.
El titular de Hacienda dialogó con el director de diario Perfil, Jorge Fonteveccia, e indicó que el Riesgo País, que superó máximos de 1.700 puntos desde la reestructuración de la deuda en 2020, se rige por la perspectiva de los mercados y no de la gente.
“Nosotros, antes de esperar a un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional para luego reestructurar la deuda, reestructuramos la deuda primero y no seguimos pagando los intereses y el capital en una situación de insostenibilidad más allá del 30 de abril de 2020. No fue la deuda lo que elevó el Riesgo País”, declaró Guzmán.
Por otro lado, Guzmán defendió las transferencias del Banco Central al Tesoro para incrementar el peso del financiamiento del déficit fiscal vía mercado. El mes de octubre cerró con un récord en adelantos transitorios por parte del Banco Central al Tesoro por $ 335.000 millones, el monto más alto desde febrero de 2020. De todas formas, el titular de Hacienda negó que exista una posibilidad de devaluación, con incremento de reservas por exportaciones,
Además, indicó que debe existir una ley que asegure que todo endeudamiento con acreedores privados en moneda extranjera y bajo ley extranjera deba ser revisada por todos los espacios políticos en el Congreso. Consultado sobre el Presupuesto 2022, Guzmán explicó que podría haber más financiamiento con el FMI o con el Banco Mundial.
“No nos queremos endeudar en dólares en el mercado. No hay ningún vencimiento de capital de deuda en moneda extranjera hasta el año 2024. Queremos profundizar el desarrollo del mercado de deuda pública en pesos. Endeudarnos en pesos cuando toca e ir bajando el déficit para endeudarnos menos. Además, buscamos mejor financiamiento por parte de los bancos multilaterales de desarrollo”, aclaró.
Guzmán adelantó también que habrá una reducción de subsidios para el próximo año, con mayores segmentaciones por grupo socioeconómico, y culpó a la inflación internacional como una de las mayores causantes de la doméstica, que ya acumula 37% hasta septiembre. “Si Argentina tuviese las condiciones crediticias de los países avanzados, tendríamos más espacio para aumentar mucho más rápido la inversión en infraestructura pública. Pero uno hace la política económica, la que mejor puede con las restricciones que tiene”, afirmó.