YPF reportó que la utilidad neta del primer trimestre de 2023 resultó con una ganancia de US$ 341 millones, lo que significa un crecimiento de 27,7% comparada con la ganancia de US$ 267 millones registrada en el mismo trimestre del año anterior. En tanto, en comparación con el trimestre anterior, cayó 26,5%.
El EBITDA ajustado alcanzó US$1,044 millones, expandiéndose 5% en base anual y 11,9% ante el trimestre anterior, impulsado principalmente por la expansión de la producción de petróleo y mayores niveles de procesamiento. Los precios internos de la gasolina y el diésel disminuyeron levemente de forma secuencial, pero se mantuvieron en 16% a/a.
La producción total de hidrocarburos continuó con una tendencia positiva promediando 511 Kbep/d, aumentando 2% trimestral y 1% interanual, impulsada por una sólida expansión interanual de 7% en la producción de crudo que resultó en la marca trimestral más alta desde 2016.
La producción de shale oil continuó generando una impresionante tasa de crecimiento del 31% interanual, mientras que la producción de shale gas aumentó un 9% en base anual, ambos en vías de cumplir los objetivos para el año.
La demanda de combustibles domésticos se expandió casi 4% frente al 1T22 pero se suavizó 3% frente al trimestre anterior debido a una menor demanda de diésel.
