“En un entorno de alta inflación, el alto nivel actual de atención a los precios representa al mismo tiempo un desafío y una oportunidad para los bancos centrales”, dice la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde , en un discurso hoy (4º) en el Centro Europeo de Economía y Finanzas.
“Por un lado, una mayor atención a la evolución de la inflación podría contribuir a un debilitamiento de las expectativas de inflación. Pero, por otro lado, es exactamente cuando la gente presta más atención a que los bancos centrales transmitan su comunicación fundamental para garantizar que estas expectativas permanezcan firmemente ancladas”.
El tema de su presentación fue sobre comunicación y política monetaria. “El entorno actual nos presenta dos razones principales por las que debemos aprovechar el momento para comunicarnos de manera más eficaz: alta inflación y altos niveles de atención a la inflación”, dijo.
Según Lagarde, en las dos primeras décadas de existencia del BCE, la inflación media en la eurozona fue del 1,7%. Pero, en octubre de 2022, se situaba en 10,6%. “Aunque la inflación ahora está cayendo, es probable que la comunicación efectiva siga siendo de suma importancia incluso después de que haya pasado el actual pico de inflación”.
Lagarde cree que la publicación de diversos índices económicos ayuda a la población a tener una mejor idea de la dinámica de la inflación y de lo que está haciendo el BCE para mitigarla. “Es importante reconocer que, al igual que otros bancos centrales, subestimamos tanto la dinámica de la inflación como su persistencia. Pero hemos estado haciendo cambios en nuestro proceso de pronóstico para abordar estas cuestiones”.
