El presidente Javier Milei ofreció una evaluación de la situación económica al asumir el cargo y prometió un rediseño del Presupuesto 2025, que se presentará en los próximos días al Congreso.
Durante el Consejo de las Américas, Milei aseguró que, al momento de asumir, enfrentó una situación crítica con un Banco Central en quiebra y un déficit consolidado del 15% del PIB.
“Todavía seguimos pagando los platos rotos. Tenemos cepo porque todavía no terminamos de resolver el problema de los stocks. El proceso de estabilización lo estamos haciendo de la mano de los precios relativos”, explicó.
Milei destacó que, a pesar de estos desafíos, su administración logró un superávit financiero sin caer en default y enfatizó que no están dispuestos a devaluar a costa de los argentinos.
El presidente también se refirió a la reforma del DNU y la ley bases como la más significativa desde la presidencia de Carlos Menem. Subrayó que el enfoque de su gobierno se basa en una macroeconomía ordenada, recorte del gasto y desregulación.
En relación con el presupuesto, Milei anunció una metodología nueva denominada “déficit cero” y la intención de no tomar nueva deuda, sino de diseñar una regla fiscal que mantenga el equilibrio.
Finalmente, afirmó que los dólares se obtienen a través de superávit fiscal, no mediante la
falsificación de dinero o estafando a los argentinos. Subrayó la necesidad de inversión para
mejorar la competitividad y rechazó cualquier enfoque de populismo monetario.
“Argentina tiene los recursos para salir adelante y está experimentando un cambio de época, con una economía que se está desregulando de manera exponencial. El 44% del gasto corresponde a las provincias y enfatizó la importancia de una visión a largo plazo para lograr una transformación efectiva”, concluyó.