En septiembre, la actividad cayó 2,7% interanual, acumulando una contracción del 5,1% en los primeros nueve meses del año.
Sin embargo, la medición desestacionalizada mostró un aumento del 1,4% en comparación con agosto, y el tercer trimestre creció un 1,4% respecto al segundo.
Las perspectivas del IGA-OJF indican que septiembre fue un mes favorable para la economía, con un repunte mensual.
Aunque el nivel sigue siendo inferior al de un año atrás, esto se debe a la comparación con una economía impulsada por el anterior gobierno. Los sectores agrícola y minero continúan liderando la actividad, mientras que la industria y el comercio experimentan caídas menores, sugiriendo una fase de recuperación.
“Se espera que el contexto económico se asemeje al de septiembre, con mejoras mensuales, aunque será difícil volver a cifras positivas en la comparación anual. La velocidad de recuperación dependerá de la recomposición de ingresos familiares, mejoras en el crédito y un aumento en la confianza, lo que podría impulsar la demanda de bienes y servicios”, concluye el informe de la consultora.
