El presidente argentino Alberto Fernández reconoció la derrota en las elecciones primarias legislativas y afirmó que “escuchamos y vamos a corregir lo que se haya hecho mal”. Además, declaró en el bunker oficialista que aprenderán de los errores y que trabajarán para convencer a los electores de que los voten en las generales de noviembre, tras
conocerse una aplastante victoria de la oposición por más de 10 puntos en las elecciones primarias nacionales y legislativas.
“Hay una demanda que no habremos satisfecho que a partir de mañana nos vamos a ocupar de prestar atención y resolver el problema que la gente nos plantea”, planteó Fernández al recordar que le restan dos años de gestión y con un pedido de acompañamiento al electorado para noviembre.
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que se sostuvo a su lado, no emitió declaraciones ante la posibilidad de perder el quorum propio en el Senado que preside.
Acompañaron además al Jefe de Estado el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof; el legislador Máximo Kirchner, y los candidatos preelectorales Victoria Tolosa Paz, Daniel Gollán, Diego Santoro y Gisela Marziotta.