La pandemia del nuevo coronavirus debe profundizar cambio en la inflación de la eurozona a largo plazo, y los precios pueden ser elevados en los próximos años, según la presidente del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, en evento promovido por la
institución.
“La pandemia también introdujo nuevas tendencias que pueden afectar la dinámica de la inflación en los próximos años. Esas tendencias pueden producir presiones de precios tanto hacía arriba cuanto hacia abajo”, afirmó ella en el Foro del BCE sobre Banco Central “Además de la pandemia: el futuro de la política monetaria”.
Según Lagarde, la pandemia de covid-19 causó un gran impacto en las cadenas de abastecimiento globales y en los mercados de trabajo domésticos, acelerando significativamente el proceso de digitalización – en siete años en Europa, de acuerdo con una estimativa.
“A largo plazo, algunos de esos cambios pueden atenuar las presiones inflacionarias”, afirmó Lagarde citando que “la digitalización puede desencadenar una segunda ola de globalización basada en la virtualización de servicios”.
Para otro lado, “en los próximos años, también hay chance de que los precios suban”. Por ejemplo, “la escasez de abastecimiento de hoy puede inducir las empresas a diversificar sus cadenas de abastecimiento o relanzar parte de su producción”.
Ella sostuvo que la pandemia causó una recesión como ninguna otra y una recuperación que tiene pocos paralelos en la historia, y la respuesta de la inflación refleja estas circunstancias excepcionales. “Esperamos que esos efectos pasen al final de las cuentas”.
Por fin, ella afirmó que la política monetaria debe permanecer “enfocada en conducir la economía con seguridad para fuera de la emergencia pandémica y elevar la inflación de forma sustentable en dirección a nuestra meta de 2%”.
Cristiana Euclydes / Agência CMA