El presidente de Perú, Pedro Castillo, dictó el Estado de Emergencia e Inamovilidad Social en las regiones de Lima y Callao desde las 2 de la madrugada local y hasta las 24 horas del día de hoy (05 de abril), con el fin de restablecer el orden social alterado tras los incidentes con los transportistas por los precios de los combustibles.
La medida fue adoptada por el Consejo de Ministros en respuesta al paro de transportistas que cumplió una semana este lunes, una jornada durante la que se vivieron cortes puntuales y temporales en carreteras del país.
“Ante los hechos de violencia que algunos grupos han querido crear mediante el bloqueo en los accesos de Lima y Callao, y en aras de restablecer la paz y el orden interno, el Consejo de Ministros decretó el estado de emergencia suspendiendo los derechos constitucionales relativos a la libertad y a la seguridad personal, la inviolabilidad del domicilio y libertad de reuniones en la provincia de Lima y Callao”, dictó el mandatario.
La medida fue anunciada en un mensaje a la Nación, donde también llamó a mantener la calma en pos de la seguridad ciudadana, destacando que la inamovilidad se establece para resguardar los derechos de todas las personas y que no se interpondrá con ningún tipo de abastecimiento ni distribución de los servicios esenciales. Remarcó también que si bien la protesta es un derecho, hay que hacerlo dentro del marco de la ley.
El conflicto comenzó el pasado 28 de marzo con un paro nacional del Gremio Nacional de Transportistas de Carga (GNTC) por el alza de la gasolina. Luego de seis días de protesta el domingo el Gobierno sostuvo una mesa de diálogo con transportistas en ese departamento, en la que suscribieron una serie de acuerdos como la reducción del Impuesto Selectivo al Consumo (ISC) en un 90% para el combustible, diésel, gasolina de 84 y 90 y gas licuado a granel y doméstico. Sin embargo, no todos los transportistas se comprometieron a liberar las vías ni levantar las medidas de fuerza.
