El presidente chileno, Sebastián Piñera, anunció este fin de semana la suspensión del alza del precio del transporte público y el toque de queda luego de una semana de fuertes tensiones
sociales y represiones que derivaron en muertos, heridos y detenidos ante la escalada de violencia de los últimos días.
“Vamos a suspender el alza de los pasajes del metro, lo que requerirá la aprobación de una ley que debe ser muy urgente, hasta que logremos un acuerdo que nos permita proteger mejor a nuestros compatriotas frente a alzas bruscas e inesperadas en el precio del dólar o del petróleo, como han ocurrido en los últimos meses y que son la causa del aumento en las tarifas”, dijo el Jefe de Estado en su discurso del sábado.
“He escuchado con humildad y con mucha atención la voz de mis compatriotas y no tendré miedo a seguir escuchando esa voz, porque así se construyen las democracias, y porque así logramos mayor unidad entre nuestros chilenos”, agregó Piñera.
Hoy será el primer día hábil del toque de queda anunciado este fin de semana por el mandatario, luego de haber decretado el estado de emergencia la semana pasada. Medios locales hablan de al menos una decena de muertos en la represión de las protestas a lo largo del fin de semana. Las clases fueron suspendidas, la mayoría de los vuelos han sido cancelados, hay supermercados que permanecerán cerrados y los bancos aún evalúan si abrirán durante el día de hoy, según la prensa local.
Sin embargo, al día siguiente, lejos de transmitir tranquilidad a la población, el mandatario dijo que están en guerra “contra un enemigo poderoso, implacable, que no respeta a nada ni a nadie y que está dispuesto a usar la violencia y la delincuencia sin ningún límite, que está dispuesto a quemar nuestros hospitales, el metro, los supermercados, con el único propósito de producir el mayor daño posible”.
“No nos engañemos. Estamos enfrentando una verdadera escalada que sin duda es organizada para causar un grave daño a nuestro país y a la vida de cada uno de los ciudadanos”, dijo ayer domingo, antes de que hablara el presidente, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, en la casa de gobierno. Chadwick informó que han movilizado a 10.500 militares y agentes de Policía a lo largo del país para “tratar de resguardar el orden público”.
El conflicto en Chile comenzó luego de que grupos de personas convocaron a evadir los controles en el metro, tras un aumento en la tarifa del pasaje del transporte público dispuesto el 6 de octubre por Piñera, con una suba de $30 pesos chilenos para el metro y $10 para los buses.
NUEVO TOQUE DE QUEDA
El Jefe de la Fuerza de Defensa Nacional en la V Región, Juan Andrés de la Maza, anunció que hoy habrá un nuevo toque de queda desde las 20 horas del lunes hasta las 6 horas del martes en toda la región de Valparaíso, una de las principales ciudades del país.
Más temprano, el intendente de Valparaíso dijo que hay que ponerle fin a lo irracional, “no ceder ante los violentistas” y no creer en lo que circula en redes sociales porque es información falsa que busca hacer daño.
El mensaje va en línea con lo que dijo el presidente ayer. “Estoy seguro de que, con la unidad de todos los chilenos, vamos a derrotar a los violentistas y vamos a recuperar el país en paz y el país con libertad que todos queremos”, dijo Piñera en su conferencia de prensa.
Federico Frau Barros /Agencia CMA Latam