El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que usó su relación con empresarios, particularmente con Larry Fink, presidente del fondo de inversiones Blackrock, para mediar en las negociaciones entre el Estado argentino y los acreedores de su deuda externa.
“Me habló el presidente de Argentina Alberto Fernández, que sabía que yo tenía buena relación con Larry Fink, que ellos estaban buscando una negociación de su deuda y que ya tenían un dictamen de cuánto podían reconocer de la deuda de Argentina, y que él quería cumplir, que no quería firmar nada y luego que se incumpliera con las obligaciones”, dijo el
mandatario en su habitual conferencia de prensa diaria.
López Obrador agregó que habló con Fink, “él es una buena persona, el presidente de Argentina excepcional; entonces, expliqué a Larry Fink si estaba enterado completamente del asunto y ellos empezaron haciendo una propuesta, como es en las negociaciones”.
“Me explicó que no dependía sólo de ellos, además de los fondos de inversión pues tienen que ver con personas que invierten en estos fondos”, dijo en base a la respuesta de Fink.
“El caso -explicó el presidente de México- es que iba a proponer a su consejo una disminución del 50 al 55% o que se aceptara por parte de Argentina, para decirlo mejor, del 50 al 55% de la deuda total”. Con eso indicó que “de todas maneras era una quita. Por un lado 41%, luego me enteré que ya no era el 41% sino el 39%, y por otro lado de 50 a 55% y ahí estaba, en eso estaba. Entonces hablé con ese propósito”, sostuvo.
Federico Frau Barros /Agencia CMA Latam
