Según el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), la recaudación tributaria nacional de agosto habría experimentado una disminución real del 13,7% en comparación con el mismo mes de 2023.
Si se excluyen los tributos relacionados con el comercio exterior, la baja sería mayor, alcanzando el 14,3%. Esta caída general en la recaudación refleja una desaceleración en la economía, con un impacto significativo en los ingresos fiscales.
La recaudación del impuesto a los combustibles habría aumentado un 36%, impulsada por el ajuste en el valor real del tributo realizado por el gobierno a principios de año. Los derechos de exportación también habrían crecido un 20%, principalmente debido a la recuperación de la actividad exportadora tras la sequía del año pasado.
“A pesar de la tendencia general a la baja, algunos impuestos mostraron incrementos reales. Por otro lado, la recaudación del impuesto PAIS, que había mostrado un fuerte crecimiento a lo largo del año, no registró un aumento interanual real en agosto”, explica Nadin Argañaraz, presidente de IARAF.
La caída en los derechos de importación, que habrían disminuido un 34% real interanual, podría deberse a la postergación de importaciones en espera de una rebaja en la alícuota anunciada por el gobierno. Además, el acumulado anual de la recaudación nacional habría caído un 8% en términos reales, y si se excluyen los tributos vinculados al comercio exterior, la baja sería del 14%.
En cuanto a la variación interanual real en los primeros ocho meses del año, los tributos que más habrían caído son Bienes Personales (61%), Internos coparticipados (20%) y Seguridad Social (15,6%). En contraste, los impuestos con mayor incremento habrían sido el impuesto PAIS (175%) y los derechos de exportación (43%), reflejando ajustes específicos y cambios en las condiciones del mercado internacional.
