La presidenta Claudia Sheinbaum firmó revirtió las modificaciones hechas en el 2013 por el expresidente Enrique Peña Nieto, por lo que Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) se fortalecen como empresas públicas del Estado, lo que les permitirá ser más eficientes y transparentes.
“Es una, digamos, una reversión de la reforma del 2013 de Peña Nieto, cuyo objetivo era privatizar. De hecho, es una reversión, incluso, de reformas a las leyes secundarias de 1992; se recupera el sentido público de CFE y de Pemex como garantes de la provisión de energía para el pueblo de México y como garantes de la soberanía nacional”, afirmó la mandataria.
La petrolera posee grandes deudas con proveedores, que ascienden a US$ 20.500 millones. Sheinbaum aseguró días atrás que parte de las deudas se han resuelto durante diciembre de 2024 y hasta febrero de este año, como parte de un plan de austeridad de la petrolera, impulsada por su administración.