El Presidente de Uruguay, Luis Lacalle, anunció ayer la flexibilización del cierre de fronteras. Lo hizo a través un decreto que permite el ingreso de extranjeros residentes en el país; brasileños de la zona fronteriza; tripulaciones de aeronaves y prácticos de buques; choferes afectados al transporte internacional de bienes, mercaderías, correspondencia, insumos y ayuda humanitaria y sanitaria.
A la vez, el decreto permite el ingreso a diplomáticos acreditados ante el Gobierno de Uruguay o ante Organismos Internacionales con sede en el país y a extranjeros beneficiados del corredor humanitario o sanitario establecido para el embarque o desembarque de cruceros, buques y aviones.
Asimismo, se contemplan la evaluación de algunos casos como los de personas bajo protección internacional (refugiados); ingresos transitorios con fines laborales, económicos, empresariales o judiciales, gestionados ante la Dirección Nacional de Migración por parte del ministerio competente al área de actividad relacionada; y situaciones justificadas de reunificación familiar.